5 de Septiembre de 2008

Iba para el centro. Me encontraba con mujer callejera que vendía flores, tenía tatuajes en la cara y en la mano. Le preguntaba dónde quedaba la parada del 188 (el que regresa para mi casa). Me acompañaba hasta una calle sin salida, que terminaba en la terminal de ómnibus. Ella, meitnras esperábamos al colectivo, me mostraba una credencial que tenía, como una tarjeta de plástico. Yo la miraba bien y me daba cuenta que la foto impresa en la tarjeta era de una parte de mi escritorio, el armario donde tengo posters de Scarlett pegados, la mujer me decía que había encontrado al foto en internet. Re loco. Después me subía la colectivo (que se transformaba en un 59) y le preguntaba al colectivero si iba hasta Cabildo, él me decía que todo por Santa Fe y que cuando llegaba me avisaba, es que tenía que ir a comprar ropa a esa zona (aunque ya era de noche).


Otro sueño. Atardecer. Llegaba a la costanera y me acercaba a una de las barandas a ver el río. Había varias personas mirando, dos de las cuales me llamaban la atención. Yo me voy a otro lado, y cuando vuelvo veo que una de esas dos chicas (que tenía una pollera a lunares) se estaba yendo, y dudo un momento si seguirla y hablarle a ella, o hablarle a la otra. A último momento decido correr a la otra chica, le toco el hombro para que se de vuelta. Le digo que me llamo Micaela, ella me contesta 'qué coincidencia, yo también soy Micaela'. Me mira con una sonrisa y empezamos a hablar. Me desarma lo hermosa que es. Caminamos por abajo de un puente, ella me pregunta por mi familia, y le cuento todos los problemas que tuve últimamente con mi madre, como si tuviera toda la confianza del mundo. Me siento nerviosa porque es hermosa y me intimida. Le voy a preguntar sobre ella, cuando nos encontramos con Palo, Agus y la otra chica (a la que decidí no hablarle). De repente estamos las 5 en una carpa (esas carpas de balneario playero) charlando. Agus tenía puesta su campera azul, pero las demás estábamos de verano. No me acuerdo el final.



Me desperté y volví a soñar. Esta vez no fue agradable. Estaba con mi papá, él dejaba una valija con algo importante en la vereda, y cruzábamos (por alguna razón) a la de enfrente. De repente un tipo se acerca y se la quiere llevar, otros dos lo interceptan y aparentan decirle que no lo haga, pero al final se meten los tres en un auto con la valija. Mi papá corre hacia el auto y empieza a pegarles en el vidrio, pero después arrancan igual. Le pregunto a una mujer que pasaba por al lado mío si tenía celular, para llamar al 101, pero me dice que solo tenía una carta. Mi papá vuelve a cruzar y de repente yo veo que uno de los tipos saca un arma y le quiere disparar, yo lo agarro de la espalda a mi papá y nos escondemos en la entrada de una casa atrás de una columna. Yo tocaba desesperadamente los timbres de los departamentos, así alguien llamaba a la policía.