Ayer me pasó algo de lo más ocurrente. Resulta que había ido a alimentar a mis lombrices con una cáscara de banana del postre, pero como me sobraba un poco, decidí hacer una maldad: sí, la tiré por el balcón hacia el edificio de al lado, recientemente construído y que me obstruye para siempre la vista y la luz. Mi plan inicial era que cayera en el patio de planta baja, pero Oh! nunca fui una buena deportista y caramba, la media cáscara de banana terminó en el balcón de en frente, aún no habitado, a 2 metros de distancia. Después de sentirme muy idiota y de entender que la bondad siempre triunfará, empecé a preocuparme por la cantidad de bicharracos que iban a aparecer gracias a mi descuido.
Ahora bien, en mi sueño yo volvía a mi casa de la escuela al día siguiente, y la cáscara ¡había desaparecido! me ponía muy contenta y festejaba que los lobos se la habían comido.
Hoy, en la ''vida real'', volví del colegio y voilá! no estaba más. Siempre será un misterio para mí, pero hay cosas que mejor, no saber.
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1 comentario:
JAJJAJAJAJAJAJAJAJAJ!!
Casi muero XD
Tenés lombrices???!! que flash! yo las quiero ver!!...
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